¿Cómo encontrar la motivación que perdí?
A veces descubrimos que vamos por la vida, sin rumbo. No sabemos qué vamos a hacer. Y no sentimos entusiasmo con nada. No nos sentimos motivados. Es ahí donde nos preguntamos ¿Qué me pasa? ¿Cómo encontrar la motivación que perdí?
¿Qué es la motivación?
Se la ha definido como “El motivo o la razón que provoca la realización o la omisión de una acción”.
A mí personalmente, me gusta decir que uno se siente motivado cuando realiza algo que le gusta. Con lo que te sentís bien. Aquello con lo que te sentís identificado. Cuando esto pasa no importa qué día ni qué hora es, haces la actividad que sea porque la disfrutas.
En algunos casos la motivación de una persona viene determinada por necesidades. Por lo que la motivación está fuertemente influida por la satisfacción de realizar una tarea. O conseguir un determinado objetivo. También por los incentivos que realizar o no una determinada conducta puedan conllevar.
¿Y si nos falta motivación para ir al trabajo?
Si, ya sé: trabajo es trabajo. De algo hay que vivir. No todos trabajamos en eso que amamos hacer. A veces tomamos el trabajo que conseguimos. Pero no nos agrada. Y nos surge el interrogante ¿Cómo hacer para encontrar motivación para ir a un trabajo que no me gusta?
También puede pasar que no encontramos motivación para hacer nuestro trabajo. Quizá porque se volvió monótono. No estamos de acuerdo con algunas cosas. O simplemente ya no nos gusta.
A veces no podemos vivir de lo que nos gusta. O mejor dicho no ganaríamos para mantenernos haciendo eso. Entonces nos sentimos atados a un trabajo que nos empieza a pesar. Nos cuesta levantarnos por las mañanas. Llegar a horario. Y hasta nuestro rendimiento ya no es el mismo.
Entonces ¿Cómo encontrar la motivación que perdí?
Cuando nos sentimos insatisfechos con algo o una situación empezamos a buscar todos los defectos. Sí, nos enfocamos en todo lo malo. En todo lo que no queremos. Sin embargo, hay una manera de encontrar motivación en las cosas que tenemos que hacer aun cuando no es lo que elegiríamos hacer.
Sí, ya sé: me dirás que es preferible no tener que hacerlas. Pero no es tan simple. Como suele pasar con el trabajo no podemos simplemente dejar de hacer una tarea porque no nos guste. Y mientras no cambiemos de trabajo debemos encontrar una forma de hacerlo y disfrutar.
Te diré que me ha pasado y me sigue pasando. Me cuesta horrores salir de la cama para ir al trabajo. Aplazo varias veces la alarma. Hasta que finalmente voy al trabajo. Ese que me aburre. Estresa y agota.
¿Entonces dirás porque sigo yendo a trabajar a ese lugar?
Pues resulta ser que me pasa como al resto. De momento no puedo vivir de lo que realmente me apasiona. Y tengo un buen trabajo. Entonces necesitaba encontrar la motivación que perdí. ¿Cómo hice?
Me puse a analizar la situación. Me dije que algo de todo lo que hago en el trabajo lo tengo que disfrutar. Me enfoqué en qué cosas eran las que disfrutaba. Porque las que no disfrutaba las sabía de memoria.
Descubrí que disfrutaba pasar tiempo con mis compañeros. Que sin importar la cantidad de trabajo, las risas estaban aseguradas. Que con lo que percibo puedo hacer cosas que me gustan. Y que ir a trabajar con eso en la mente y una actitud positiva, hace que el día fluya fácilmente.
Empezar el día pensado que veré a mis compañeros y me reiré, me dan ganas de ir a trabajar. Por más complicado que sea el día, podré hacer con el sueldo algo que me gusta. Tener en cuenta esos aspectos hizo que encontrara la motivación que perdí.
Por eso aquí te dejo mis “ 3 Tips para encontrar la motivación que perdí”
- Primero: pensá en qué te enfocas a la hora de hacer las cosas. ¿Qué hay en tu cabeza cuando te toca hacer algo que no te gusta? ¿Te enfocas en eso? ¿Ves todo negativo? ¿O tratas de encontrarle un lado positivo?
- Segundo: enumera cuáles son las cosas que disfrutas hacer. Hace una lista de las pequeñas cosas que disfrutas hacer en el trabajo, no importa que tan chiquita sea. Tal vez sea ese cafecito o té que te podes tomar a media mañana. Anotalas.
- Tercero: hace una lista de las personas con las que compartís espacios y con cuántas de ellas disfrutas hacerlo.
Te vas a dar cuenta que son muchas las cosas buenas que nos rodean, sólo que prestamos atención y ponemos nuestra energía en esas cosas que no nos gustan. Espero que mis tips te sirvan para encontrar la motivación que reside en tu interior.
Personalmente considero que la motivación es como la felicidad. Es inútil que la busquemos por todos lados, sino la llevamos por dentro. Está en nosotros encontrar la motivación que perdimos. Encontrarle sentido a las cosas que hacemos. Descubrir qué nos motiva es la piedra angular para disfrutar cada cosa que hagamos.